La adolescencia una transición al desarrollo

A continuación les presento un artículo expuesto por el psicólogo Puro Blanco en el segundo taller de guías y orientadores de pastoral de adolescentes.

Donde se nos explicaba que la adolescencia es el periodo de la vida de la persona comprendido entre la aparición de la pubertad, que marca el final de la infancia y el inicio de la edad adulta. Puede comenzar en las niñas a los 8 años y en los varones a los 12. Termina entre los 18 y 19 años. Es un periodo complejo. Se ha comparado la adolescencia como una casa en tiempo de mudanza; un desorden temporal.

Algunos autores la llaman edad ingrata. Otros la denominan edad de cristal. Los adolescentes son muy grandes para servilleta pero muy pequeños para mantel. En el mundo de los grandes son pequeños, en el mundo de los pequeños son grandes, entonces sienten que son nadie (baja autoestima).

La pubertad

La palabra pubertad tiene su etimología del latin “pubere” que significa cubrirse de pelo. En esta etapa del desarrollo el crecimiento  recibe  un impulso considerable. El organismo empieza a ser sacudido por la crisis de la pubertad. Hay un salto rápido en la altura.

Crecimiento de las extremidades inferiores que origina el aspecto larguirucho de los púberes. Hay aumento de las masas musculares del tronco.

Hacia los 14 o 15 años aparece la madurez fisiológica de los órganos específicos del sexo. La pubertad activa las glándulas específicas de la sexualidad. La hipófisis, glándula que se encuentra en la silla turca del esfenoides, con sus hormonas es la responsable del desenvolvimiento gradual de los complejos fenómenos del crecimiento. Regula toda la economía del organismo. La tiroides se vuelve hiperfuncional. En esta edad, los pubescentes pierden la calma y entran en un estado de excitación y emotividad por la prevalencia del simpático sobre el vago. El mundo sentimental y fantástico va empapándose cada vez más de contenido sexual.

El cerebro adolescente

La adolescencia es un momento crucial para la maduración de la personalidad ya que el cerebro se reordena. Aproximadamente de los ocho a los dieciocho años la sustancia gris se va convirtiendo en sustancia blanca, se perfeccionan las capacidades cognitivas, la capacidad de estudio, la memoria, etc.

Los científicos han identificado una región específica del cerebro llamada amígdala, la cual es responsable de las reacciones instintivas como el temor y el comportamiento agresivo.

Esta región se desarrolla temprano, sin embargo la corteza frontal el área del cerebro que regula el razonamiento y nos ayuda a pensar antes de actuar, se desarrolla más tarde. Esta parte del cerebro va cambiando y madurando hasta bien entrada la edad adulta. En las chicas maduran más rápidamente las regiones de la corteza frontal que procesan el lenguaje, el control de riesgo, la agresividad y la impulsividad. En los chicos maduran en las regiones del lóbulo inferior parietal cruciales para las tareas espaciales. El cerebro del adolescente es inestancable por los rápidos cambios que permiten el paso del infantil al cerebro joven.

En esta etapa se produce la transición desde la dependencia del mundo familiar a la independencia a través de las relaciones interpersonales y sociales. Los adolescentes tienden a relacionarse con iguales= masificación.

Les gusta estar solos con otros de su misma edad. Hablan horas y horas aunque sean temas tontos. El sonido de la voz de sus amigos, hablar con otros pares, les ayuda a madurar ya que las relaciones sociales ayudan a liberar oxitocina (hormonas responsables de que amemos, seamos compasivos y amables).

Se experimentan cambios en la motivación, los impulsos y las emociones, se altera  el mundo afectivo personal en una etapa en que los sistemas que integran las emociones en las decisiones racionales están madurando. Al adolescente no le sirve mucho las experiencias de otro, las tiene que vivir el.

Estructuras inmaduras en el adolescente

• La motivación 

• El autocontrol

• La toma de decisiones

• Planificación hacia el futuro. (Para los adolescentes su futuro es el fin de semana no planifican futuro, buscan satisfacción inmediata, placer inmediato.)

• Flexibilidad de pensamiento 

• La empatía

• El juicio

• Conductas sociales, morales y éticas.

La maduración conlleva cambios mentales, emocionales, psicológicos y sociales influidos por las hormonas sexuales, cuya concentración se incrementa dramáticamente en la pubertad.

Duermen poco, los adolescentes duermen mal. Tienen un desfasaje del sueño de tres horas. Duermen tres horas más tarde que los adultos, despiertan temprano y se levantan de mal humor. Suelen estar somnolientos y atontados, estos les puede disminuir el rendimiento académico y estar más expuestos a riesgo por accidentes.

Cambian de humor, enrojecen o padecen de humedad en las manos. Los rostros pierden el encanto de la infancia para volverse más afilados y pálidos. Hay una metamorfosis del cuerpo. El cuello se alarga, se estiran las piernas y pies, el calzado queda pequeño, la cabeza crece diez milímetros, el tronco permanece corto y rechoncho. Les cuesta identificarse con un nuevo cuerpo que muchas veces se engordan o se llenan de espinillas.

Son personas que están volviendo a nacer y su ego crece con mucha rabia y soledad. Hay una falta absoluta  de armonía. Hay una falsa de coordinación de movimientos, que se manifiesta por gestos desmañados e imprecisos por eso chocan con todo a su paso y caminan desmadejados. Aparece dismetría de la mímica en especial en ciertos estados de tensión psíquica que los adultos suelen interpretar como muecas y mofas. Los adolescentes suelen hacer mofa de todo y algunos prefieren palabrotas que no se han oído en casa.

La estructura tiende a estropearse y se observa cierto descuido en sus trazos. Puede aparecer miopía prepuberal. Surge un prepotente deseo de afirmarse a sí mismo y al mismo tiempo un profundo malestar. Puede adoptarse una posición crítica en relación con sus padres y maestros que se manifiesta en una oposición más o menos abierta a todo lo que se impone con autoridad.

Este gusto por la desobediencia y la rebelión, que no sabe aceptar razones, es la expresión de deseo de autonomía. La rebeldía suele darse en el hogar, no en las pequeñas sociedades a las que pertenece. 

De la fase serena se pasara a la fase de desorientación, inquietud y de susceptibilidad.

Aparecen nuevos intereses que se apoderan de la mente y el corazón del adolescente.

Son adictos a la música que les hace liberar dopamina y les ayuda a madurar el cerebro, por eso no pueden estar lejos de la música.

Puede desatarse la costumbre de mentir, expresión de un profundo molestar y un estado de inseguridad y de miedo casi siempre  debido a una educación deficiente.

Es la edad típica del mecano (me quiero ir de casa).